En Hasta que la muerte nos devore, cortometraje dirigido por Pablo Lequio, asumimos la producción integral con un desafío extremo: 72 horas para llevarlo a rodaje dentro del concurso Fin de Semana Sangriento del Festival Buenos Aires Rojo Sangre.

Resolvimos casting, búsqueda de locación, dirección de arte y logística completa (equipo, permisos, plan de rodaje y posproducción exprés), priorizando eficiencia sin perder identidad estética. El resultado fue una pieza contundente, levantada en tiempo récord y pensada para destacar en el circuito de terror independiente, con una narrativa y una puesta en escena optimizadas para festivales.
Back to Top